Restaurante y Catering para tus ocasiones especiales

Huesca, la puerta de los Pirineos, es una de las mejores provincias españolas para hacer una escapada. Sus incomparables paisajes, su historia milenaria y la hospitalidad de sus gentes la han convertido en la favorita de cada vez más turistas.

Si estás pensando en pasar unos días en esta provincia aragonesa, te será de mucha utilidad este artículo en el que podrás encontrar un resumen sobre lo más destacado que debes ver, y por supuesto, algún consejo sobre restaurantes en Huesca.

Empezaremos por su capital. Situada en el norte de la comunidad autónoma de Aragón, capital de la provincia homónima y de la comarca de la Hoya de Huesca, la ciudad de Huesca cuenta según datos del INE con algo más de 53,000 habitantes.

Cuenta con una historia milenaria que empezó con los íberos y que ha acogido a multitud de civilizaciones como los romanos, los visigodos, los árabes, y por supuesto, tuvo un destacado papel en tiempos de la corona de Aragón. Toda esta historia y los miles de años que contemplan sus calles, edificios y monumentos la convierten en un auténtico museo al aire libre.

Nuestro consejo es que empieces por El Coso, la que podríamos decir que es la arteria principal de la ciudad. Dividida entre el Coso Bajo y el Coso Alto, es una zona peatonal llena de bares y actividad y que podrás recorrer con total tranquilidad ya que es peatonal. Algunos puntos de interés que no puedes dejar de visitar son: el Teatro Olimpia, los juzgados, el edificio de Correos, la iglesia de San Vicente el Real, la iglesia de Santo Domingo y San Martín y la plaza de toros.

Otro imprescindible es el parque de Miguel Servet, fundado en 1928 y con casi 70,000 m2 de superficie, más de 1600 árboles, de 63 especies distintas, y un total de 49 especies de arbustos. Este parque municipal se construyó sobre los jardines del palacio de Vincencio Juan de Lastanosa, un erudito, coleccionista, numismático y mecenas, miembro de la corte de Carlos II.

Pasemos ahora al resto de la provincia, parte de la cual se encuentra muy cercana a la capital aragonesa, motivo por el cual puede ser de interés en caso de que organices un evento en la zona y busques un catering en Zaragoza. Sin duda, la joya de la corona es el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Un entorno natural impresionante en el que destaca el valle de Ordesa, con cumbres que superan los 3.000 metros de altura y un circo glaciar junto a cascadas y ríos de postal. Aunque este valle se suele llevar todos los focos, existen otros tres sectores que bien merecen una visita: Escuaín, Pineta y Añisclo.

Pero Huesca es mucho más. Para finalizar, aquí tienes algunas recomendaciones que seguro que te van a gustar:

Valle de Bujaruelo, en el que destaca el puente medieval de San Nicolás de Bujaruelo.

Ibón de Plan, un lago glaciar a más de 2.000 metros.

Ainsa, un encantador pueblo de estilo gótico medieval en el que perderte callejeando y contemplar sus construcciones tradicionales.

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